Las Redes Sociales nos han Minimizado
- Erick Soto
- 14 abr 2019
- 7 Min. de lectura
Actualizado: 8 feb 2020
Nos han hecho tan grandes que ahora somos diminutos.
Solo un evento sin precedentes en la historia humana podría justificar el atrevimiento de un oxímoron como el propuesto al inicio.
El auge de las redes sociales ha pasado ya. Actualmente, vivimos en una sociedad completamente acostumbrada a ellas, donde las novedades aparecen con poca frecuencia y pierden lo novedoso tras su adopción.
¿Eso es normal o acaso estamos locos?
En el ajetreado estilo de vida que llevamos es común adoptar y rechazar ciertas prácticas, y a pesar de que las viejas instituciones sociales resultan cada vez menos válidas, bien dijo Charles Dickens:
El ser humano es un animal de costumbres.
No es que estemos completamente locos o que sea completamente normal adoptar con tanta naturalidad las conductas y prácticas de la sociedad digital.
Se le llama dialéctica (la historia en constante movimiento o cambio). Y ante fenómenos como la globalización, la forma de relacionarnos y percibirnos ha cambiado drásticamente.

Fuente: https://cutt.ly/vex9LE
Pero. ¿Cuándo inició esto?
Definir a la primera red social sería una labor muy ardua y probablemente poco veraz, sin embargo, de acuerdo a la línea temporal planteada por Isabel Ponce (2012), el inicio del social networking se le puede atribuir a SixDegrees, un sitio que permitió crear un perfil personalizado y una lista de amigos, características que conocemos de sobra actualmente.

La primera red social. Fuente: https://cutt.ly/femNel
En 2004, Facebook estaba ya en funcionamiento. Conocemos ya la historia: Un chico llamado Mark Zuckerberg creo un sitio para que los alumnos de Hardvard compartieran sus vivencias diarias. El concepto gustó tanto que se abrió al resto de personas.
El boom llegó hasta 2007 cuando la plataforma se tradujo a más idiomas.

¿Usaste la plataforma cuando lucía así? Fuente: https://cutt.ly/YeQf8H
¿Qué ha cambiado desde ese entonces?
Uno de los principales atributos de las redes sociales es, como su nombre lo indica, la socialización. Tim Berners Lee, creador de la World Wide Web, dijo alguna vez:
La web es más una creación social que técnica.
La intención de las primeras social webs fue conectar a la gente entre sí. Sin embargo, en la actualidad, eso se ha sumado a una larga lista de funciones con las que contamos en estos espacios digitales.
Según el sitio que visitemos las funciones cambiarán. Twitter: microblogging; Instagram: photoblogging; Pinterest: photosharing; Facebook: ¿?
Facebook ha sido uno de los agentes responsables de la minimización del internauta
¿Por qué? Para entender este punto vendría bien un ejercicio: Lee los siguientes nombres de redes sociales y piensa qué es lo primero que se te viene a la mente. Sería genial si compartieras en los comentarios lo que pensaste. ❤
Facebook.
Twitter.
Instagram.
¿Qué se me vino a la mente? Desorden (Facebook); Insignificancia e información oficial y veloz (Twitter); Scrolling (Instagram). Alguna vez le pregunté a un amigo cercano quien tiene una adicción a redes sociales: << ¿Qué se te viene a la mente cuando te digo “Facebook”?>>.
Me respondió: “Publicidad”. Comencé a reír de satisfacción, entonces rápidamente cambio sus palabras a “noticias”, para al final terminar añadiendo “memes”.
Con esta anécdota no necesito explicar por qué Facebook me representa desorden.
Escuchando un podcast sobre tecnología (no recuerdo precisamente cuál, es probable que fuera iSenaCode Podcast o Esto Con Jobs No Pasaba), alguno de los tertulianos dijo que Facebook es un cajón de sastre, y está tratando de emular el triunfo de WeChat en China.
¿WeChat?

Fuente: https://cutt.ly/ceQZcB
Es la aplicación más usada en ese país, “es Facebook, Instagram, Skype, Uber, Tinder y Amazon en una sola plataforma” (BBC Mundo, 2017).
Sin embargo, WeChat tuvo éxito por las condiciones que se viven en China, donde el acceso a la web completa está restringido y la gente está acostumbrada a un estilo de vida centralizado debido al modelo socioeconómico mixto que impera en dicha nación.
No es ningún secreto que la plataforma comparte la información de los usuarios con el gobierno chino.
Facebook no triunfará como WeChat
(Al menos, por ahora, y esperemos que nunca). Por una sencilla razón: en occidente estamos acostumbrados a la competitividad constante de empresas. Usamos diferentes aplicaciones por las funciones que nos aportan cada una de ellas.

Mantenemos chats distintos en Instagram, Messenger, WhatsApp, Telegram, etc. Fuente: https://cutt.ly/UeQMi3
Pero. ¿Hasta donde está dispuesto a llegar el usuario común con tal de mantenerse cómodo en el mundo digital? Por ahora, Facebook es un desastre atiborrando la plataforma con stories, Facebook dating (el Tinder de Facebook), juegos y apps de terceros, Marketplace (el Mercado Libre de Facebook), y las funciones habituales que ya teníamos antes.
Supongamos que poco a poco se ordenan todas estas funciones y resultan más accesibles y apetecibles de utilizar. ¿Te sentirías completamente cómodo para sacarle provecho a todas ellas?
Si Facebook abarcara las funciones que ya tienen Instagram y Twitter. ¿Abandonarías esas plataformas para quedarte solo con una?
Antes de responder, recuerda uno de los aspectos más negativos de la plataforma social más popular del mundo:
Facebook no aboga por la privacidad de sus usuarios

¿Recuerdas cuando el creador de Facebook fue citado a tribunales estadounidenses después del primer gran escándalo de privacidad? Fuente: https://cutt.ly/jeWg53
Esto no es un secreto ya. En marzo y abril de 2019 se dieron a conocer dos sucesos: Algunas contraseñas no estaban siendo cifradas y se almacenaban en forma de texto, de forma que cualquier empleado podía acceder a ellas (Miguélez, 2019); quedó al descubierto información de aproximadamente 540 millones de usuarios, desde nombres de usuario hasta contraseñas (González, 2019).
Estos son percances que no son conocidos por gran parte de los usuarios, y aún cuando lo saben parece no tener importancia. Suele ser común escuchar comentarios de personas similares a:
Pues no importa, no soy nadie importante. ¿Qué información van a querer de mí?
Ese es uno de los pensamientos más graves que los internautas pueden tener. Es una de las consecuencia de la minimización de los usuarios.
El internauta merece respeto a su privacidad por el simple hecho de ser el motor para las grandes páginas y servicios en la red
En el libro Amor Líquido, el sociólogo Zygmunt Bauman (2003), habla sobre el valor de los seres humanos. No vale la pena dejar morir a 5 con tal de que sobrevivan 50 más, porque el hecho de que uno solo de ellos sufra, representa ya algo grave que nadie debería experimentar.
Si extrapolamos este concepto a la navegación en redes sociales, la información de un solo usuario merece privacidad y respeto por el simple concepto de dignidad inherente a todas las personas.
La información filtrada o vendida suele llegar a empresas interesadas en monitorear los hábitos de consumo de los internautas, su orientación política o los horarios de su rutina. Con base en esos datos es sencillo enlazar una comunicación persuasiva con el fin de vender un producto o mostrar propaganda de cualquier índole.

El respeto a la privacidad es un derecho fundamental para los usuarios de internet. Fuente: https://cutt.ly/OeWRWe
Saturación e infravaloración de contenidos: Una consecuencia más de la minimización
Entre tantos motivos para justificar el uso masivo de redes sociales, uno de ellos es el Storytelling. Sergio Talavera, director de Cerebranding, definió durante una conferencia en la Facultad de Estudios Superiores Acatlán al Storytelling como:
El arte de crear y de contar historias, relatos que sean reales, con fines persuasivos y de conexión.
Cada meme en la biografía de Facebook, cada storie en Instagram y cada retuit cuentan la historia de quién eres, cómo eres, qué te gusta, quiénes son tus amigos y cuáles podrían ser tus tendencias.
Alfredo Andrade, Maestro en Comunicación por la UNAM, menciona que la vida en lo digital se ha convertido en una cultura organizacional, para la cual, el Storytelling ofrece una forma de conocerla y da pie a la polifonía, la cual se define como:
Escuchar muchas voces dentro de la organización.
Sin embargo, la necesidad por decir algo produce mensajes de baja calidad. El fotoperiodista, Federico Gama, plantea que, desde hace quince años, la fotografía se ha centrado en el autoreconocimiento.
Me fotografío, luego existo.
Todo esto es producto de un deseo narcisista por decir:
¡¡¡AQUÍ ESTOY!!!
Un ejemplo gráfico y sencillo de esos contenidos de baja calidad puede ser ilustrado con la siguiente canción:
Es común toparse en Instagram con stories insignificantes, que no entretienen, a las que solo vale deslizarles el dedo y no prestarles más atención. Publicaciones o imágenes en Facebook dignas del olvido.
Twitter es un espacio que se ha convertido, para algunas personas, en una terapia grupal al publicar al alcance de todos los problemas más íntimos de sus vidas. Desde un punto de vista sociológico, es preocupante ver debilitada la barrera de lo que debe ser privado y lo que debe ser público.
En un desesperado intento por atraer la atención, los usuarios relatan cantidades inmensurables de anécdotas que derivan en la insignificancia, en la saturación del feed de noticias, o en el (peor) mejor de los casos, logran su cometido al capturar las miradas de otros internautas.
Las redes sociales no siempre generan diálogos
Para Bauman, las redes sociales conllevan encerrarse en una burbuja con gente que solo piensa como ellos, o en el peor de los casos, acrecienta la sensación de soledad en medio de una sociedad egocéntrica repleta de individualismo.
Hemos sido reducidos a un simple perfil de Facebook o una cuenta en Instagram. Pertenecemos a una sociedad en la que se le otorga a una persona con miles de seguidores, el privilegio de grabar un CD antes que a una agrupación o solistas con talento y ganas de innovar.
Es responsabilidad de cada usuario en internet el velar y exigir por la privacidad de sus datos, observar a qué plataformas les conceden el acceso y trabajar para combatir la desinformación y la saturación en las redes sociales.

Fuente: https://cutt.ly/LeW8LC
Fuentes consultadas para este artículo
Bauman, Z. (2003) Amor Líquido. Acerca de la fragilidad de los vínculos humanos. Ciudad de México: Fondo de Cultura Económica.
BBC Mundo. (2017) El secreto del éxito de WeChat, la red social china que está causando sensación en todo el mundo. BBC. Recuperado el 14 de abril de 2019 de https://www.bbc.com/mundo/noticias-39846951.
González, C. (2019) Nuevo escándalo de Facebook, los datos de 540 millones de usuarios al descubierto. iPadizate. Recuperado el 14 de abril de 2019 de https://www.ipadizate.es/2019/04/06/nuevo-escandalo-facebook-brecha-seguridad-apps/
Miguélez, A. (2019) Los empleados de Facebook e Instagram podrían haber visto millones de contraseñas. ¡Cambia la tuya!. La Manzana Mordida. Recuperado el 14 de abril de 2019 de https://lamanzanamordida.net/error-claves-acceso-facebook/
Ponce, I. (2012) Historia de las redes sociales. Observatorio Tecnológico. Recuperado el 14 de abril de 2019 de http://recursostic.educacion.es/observatorio/web/es/internet/web-20/1043-redes-sociales?start=2
Rodríguez, E. (2018). Cómo es la historia de Facebook. La Información. Recuperado el 14 de abril de 2019 de https://www.lainformacion.com/tecnologia/como-es-la-historia-de-facebook/6343339/
Imagen del encabezado: https://blog.fonoma.com/qu%C3%A9-redes-sociales-usan-los-cubanos-d244cf8d4e80
#navegación #capitalismo #Zuckerberg #Bauman #Mark #historia #China #minimizar #privacidad #sociología #Twitter #alienación #saturación #social #respeto #violación #escándalo #Facebook #humillar #SixDegrees #análisis #opinión #Internet #Instagram #redes #infravaloración #usuarios #responsable #información #control #geek #alienar #WeChat #sociales #insignificancia #insignificante #red #imperialismo
Comentarios